Paloma

Palomas en Puerto Rico

La paloma doméstica, que se encuentra por toda la nación, es una plaga que está presente todo el año y se adapta bien a los ambientes construidos por el hombre. Las palomas domésticas a menudo son la plaga de aves más problemática para dueños de propiedades tanto en zonas urbanas como en pequeñas comunidades rurales. La abundancia de refugios que proporciona el diseño de muchas viviendas y edificios garantizan que las palomas tengan amplios espacios donde permanecer, reposar y anidar. Las palomas afean las viviendas y estructuras y, más grave aún, se sabe que son portadoras de enfermedades como criptococosis, toxoplasmosis, salmonelosis, intoxicación por alimentos, entre otras. Esto hace que su presencia sea peligrosa cuando anidan en las regiones de San Juan o Ponce.

Hábitat de la paloma

Lejos de la civilización, las palomas a menudo viven en grandes precipicios rocosos o cerca de ellos. En las ciudades y pueblos, las palomas dependen de que los seres humanos les proporcionen alimento y lugares para posarse y anidar. Estas aves anidan en las piezas de apoyo de ventanas, en techos, unidades de aire acondicionado, semáforos, carteles comerciales y debajo de puentes. A pesar de que prefieren granos y semillas, las palomas consumen basura, insectos, pan y otras cosas que la gente les dé. Dondequiera que anidan, a menudo hay alimento y agua en abundancia, pero cuando no hay, las aves van en busca de estos recursos a zonas cercanas rurales o sin urbanizar que por lo general están a distancias hasta las que pueden volar. Las palomas pueden reproducirse todo el año y las temporadas pico de apareamiento son la primavera y el otoño.

Comportamientos, amenazas o peligros de la paloma

Los problemas de salud pública graves y constantes que ocasionan las palomas domésticas no los supera ninguna otra especie de aves. Se sabe que las palomas portan o transmiten diversas enfermedades, y que sus excrementos y plumas pueden contaminar alimentos destinados al consumo humano. Sus excrementos afean y aceleran el deterioro de viviendas y edificios además de contaminar las zonas donde la gente trabaja o por donde camina. Los excrementos y nidos de palomas obstruyen los bajantes de canaletas y las tomas de aire, estropean las piezas de apoyo de ventanas, y convierten en un peligro las chimeneas y las escaleras de incendios. Entre los ectoparásitos de las palomas se encuentran los piojos masticadores, las pulgas y los ácaros, algunos de los cuales pican a las personas. Por esta razón, el control de esta plaga común en zonas urbanas siempre debe ser una prioridad.

Si descubre palomas posándose en su propiedad, comuníquese con una compañía profesional de control de aves inmediatamente para hablar sobre tácticas de control de palomas.